Estas chuletas de puerco fritas son jugosas, tiernas, deliciosas y muy fáciles de hacer. Las vamos a dorar y luego terminarlas con una salsa de mermelada de ciruelas. Una verdadera delicia.
Lo mas importante en esta receta es no permitir que las chuletas se nos sequen. Esto puede pasar así es que tengan cuidado de no cocinarlas demasiado. Cuando las volteen en la sartén no usen un tenedor puesto que le harán huecos a su carne y pueden perder jugos valiosos! Usen una pinza o una espátula.
Esto es lo que van a necesitar para hacer esta receta tan deliciosa de chuletas de puerco fritas:
Sirve a ocho
8 chuletas de cerdo – lavadas y secadas
hojas de orégano secas
4 Cucharadas de mermelada de ciruela
2 Cucharadas de mostaza amarilla
2 Cucharadas de vinagre de sidra de manzana
¼ de taza de vino tinto
1 Cucharada de aceite
2 cebollas pequeñas – en rodajas
Colocar las chuletas de cerdo en un plato y sazonar generosamente con sal, pimienta y orégano en ambos lados. Dejar que repose durante unos 15 minutos a temperatura ambiente para que no estén muy frías al cocinarlas.
Mezclar la mermelada, mostaza y el vinagre en un tazón. Añadir el vino y mezclar bien. Dejar de lado.
Calentar el aceite en una sartén grande. Agregar las chuletas cuando este caliente y dorar ambos lados. No dé vuelta hasta que se dore de manera uniforme en la parte inferior. Utilice pinzas o una espátula para voltear sus chuletas y no un tenedor para que no se claven y se pierda todo el jugo. Poner a un lado.
Añadir la cebolla a la misma sartén y cocinar. Raspar la sartén a fin de tomar ventaja de los bits de color marrón. Cocinar las cebollas hasta que empiecen a dorar. Devolver las chuletas de cerdo a la sartén. Unte la parte superior de las chuletas con la mitad de su salsa y delas la vuelta. Unte el otro lado con la salsa restante.
Cocine las chuletas de 3 a 4 minutos por lado y sirva. Si no están completamente cocidos cocinar un poco más. Asegúrese de servir con la deliciosa salsa de cebollas. ¡Disfrutar!